Con la muerte en los talones

 Roger O. Thornhill es un prestigioso agente de publicidad de New York que ve como su vida se pone patas arriba por culpa de la confusión con un agente de la CIA. Roger comenzará a investigar lo ocurrido y sin darse cuenta se verá envuelto con una peligrosa organización criminal. A esto se añade la persecución de la policía, que le acusa de un crimen que no ha cometido. En su búsqueda de la verdad sólo contará con la inesperada ayuda de la bella Eve Kendall. Pero como siempre nada es lo que parece.

 Interesante película de intriga con trasfondo de espionaje. Argumento del que Hitchcock es un maestro. Película entretenidísima, desde el principio la acción no para en ningún momento. Muy ingenioso toda la trama del espía; nadie lo ha visto, y sólo conocemos de su existencia por el traslado de sus pertenencias a lo largo de los EEUU.

El film tiene escenas buenísimas. Por encima de todo, la magistral de la persecución de que es objeto Roger por un avión, quién no la ha visto alguna vez. La muerte le pisa los talones literalmente.

 Los actores están estupendos. Me quedo con el siempre encantador Cary Grant, como siempre es un dandy irresistible. También me gustaron mucho Eva Marie Saint como Eva y James Manson en el papel de malo del film.

 Con la muerte en los talones (1959)

 Alfred Hitchcock